lunes, 6 de octubre de 2008

MEDITACIONES

Una Limpieza Matinal

El temor es mucho más invalidante que lo que ustedes temen. Los obstáculos y los desafíos pueden hacerlos más fuertes, los cambios pueden abrir nuevas puertas. Pero el miedo sólo los debilita y los insensibiliza, son incapaces de escalar esa colina o caminar a través de esa puerta que se abre hacia lo nuevo.
Y de esta manera cuando están en las garras del temor, ustedes deben primero vencer ese temor y limpiar un espacio en el que pueden saber, ver, sentir y oír lo que es verdad. Porque el temor no les dice la verdad. Y si ustedes escuchan solamente al temor, se perderán la guía amorosa y verdadera que está allí para ustedes.
Cada mañana, desarrollen una rutina que ustedes sigan fielmente, no importa la que sea. Ajústenla a medida que aprenden lo que funciona mejor. Pero no dejen de hacerlo ni una simple mañana. Si lo desean, podrían sostener un cristal en su mano mientras hacen su rutina, a fin de que puedan tenerlo con ustedes durante el día.
Comiencen respirando profundamente varias veces. Si están muy tensos, traten de contar desde diez mientras respiran. Inhalen diez. Exhalen diez. Inhalen, nueve, Exhalen nueve. Y así hasta el uno.
Luego imaginen una escena que los relaje, quizás un lago azul profundo con verdes árboles a su alrededor y unos pocos pájaros deslizándose a través de un cielo azul tocado con nubes. Una brisa gentil mueve los árboles y suavemente toca su mejilla, sus cabellos. Permanezcan en su imagen hasta que se sientan calmos y tan profundos como el agua.
Ahora visualicen a su yo superior como una esfera dorada brillante sobre su cabeza. Esta es la parte de ustedes que es eterna, que sabe todo, que contiene la intención y el propósito, que está hecha de amor y solamente amor. Observen y sientan esta presencia con fuerza.
Ahora abran la parte superior de su cabeza a esta presencia resplandeciente. Observen y sientan como el brillante canal de luz irradia hacia abajo e ingresa a ustedes, gradualmente llenando su cuerpo. Permitan que la irradiación ingrese dentro de ustedes, lentamente desde arriba hacia abajo, primero limpiando su mente de lamentos pasados y preocupaciones futuras, luego desplazándose hacia abajo para llenar su corazón con amor. Observen como el resplandor se extiende hacia sus brazos y hacia sus manos, donde llena su cristal con luz y amor. Miren deslizándose a su centro donde la paz los llena como un pozo profundo.

Permitan que la irradiación se desparrame abajo y abajo, a través de todo su cuerpo por completo, a sus pies y más allá, en la tierra. Perciban que en cada lugar que resplandece, ustedes son llenados con amor y solamente amor, un amor tan fuerte que el temor y la duda no puedan posiblemente sobrevivir allí. Y cuando estén listos, inhalen profundamente otra vez para sentir qué libres de impurezas y limpios están, qué libres y sin cargas.
Ahora sería un momento excelente para recibir guía para ustedes hoy. Pregunten "Qué deberé hacer justo ahora?" o "A qué deberé enfocarme hoy?" o "Cómo manejaré esta situación?" Preguntan una pregunta comenzando con "cómo" o "qué" que se enfoca en la acción siguiente y más importante para que ustedes comprendan su vida.
No pregunten porqué las cosas son como son y no pregunten lo que el futuro les depara. Pregunten solamente cómo deberían actuar y confíen que la contestación contiene una profunda sabiduría de su propósito más elevado como así también el futuro probable que se devela frente a ustedes. Luego escriban las respuestas que reciben.
Y durante todo el día, cuando están estresados o ansiosos, toquen su cristal; recuerden los sentimientos de amor y luz en su mente y en su cuerpo, observen la guía que pusieron por escrito.
Aprendan a reconocer este sentimiento resplandeciente como el lugar donde ustedes pueden hacer excelentes elecciones. Desarrollen métodos para alcanzar este lugar; fácil y rápidamente a fin de que nunca estén pidiendo guía o tomando decisiones a causa del temor.
Y sobre todo, recuerden que ustedes son profundamente amados, rodeados por amor y guía en todo momento. Es su trabajo permanecer calmo y puro para que puedan sentir y conocer este amor y escuchar a los ángeles mientras ellos cantan su nombre.


Meditacion de: carriehart
Traducción: Anita Virelli
Edicion manantial caduceo



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